Proyecto Milpillas, entre el poder y la corrupción

“Se necesitarían seis presas como Milpillas para enfrentar sobreexplotación de agua”: Especialista

-La zona  conurbada se abastece de cinco acuíferos que un tercio total de más de 260 millones de metros cúbicos anuales

-La presa Milpillas pretende aumentar la oferta por 41 millones de metros cúbicos anuales

- No se menciona por qué los acuíferos están sobre explotados, por dar concesiones más allá de la capacidad de los acuíferos

Para revertir los efectos de la sobre explotación de agua en la zona urbana Zacatecas-Guadalupe, y municipios aledaños, se requieren al menos seis presas como la del proyecto Milpillas que de lograrse, impactará ejidos de Jiménez del Teúl, Chalchihuites y Sombrerete.

Así lo afirmó el Docente Investigador de la Unidad Académica de Estudios del Desarrollo de la Universidad Autónoma de Zacatecas,  Darcy Víctor Tetreault,  quien precisó que  en la manifestación de impacto ambiental de la presa Milpillas se hace hincapié en la justificación, porque  según la manifestación de impacto ambiental,  va a permitir que los acuíferos en  la región centro de Zacatecas se recuperen.

Eso es totalmente falso-indicó- es increíble que puedan pasar esa manifestación de impacto ambiental sin hacer los cálculos básicos. Hay cinco acuíferos que están aquí en la región centro, Aguanaval, Chupaderos, Calera, Guadalupe Bañuelos y Benito Juárez.

El investigador, quien participó en la décima primera sesión del seminario de pensamiento crítico  “Gestión y uso del agua en la región centro norte de México: Una perspectiva desde  la justicia hídrica” de la UAZ, dijo que  esos cinco  acuíferos, tienen un tercio total de más de 260  millones de metros cúbicos anuales. La presa Milpillas, pretende aumentar la oferta por 41 millones de metros cúbicos anuales, “podemos hacer los cálculos  y resulta que necesitamos mas de seis presas de ese tamaño para acabar con la sobre explotación”.

 Y eso-aclaró  suponiendo que el aumento de la oferta del agua se traduzca en una disminución proporcional en la demanda que se ejerce a los acuíferos.

SOLUCIONES FALSAS

El también Maestro en Estudios de Desarrollo Internacional, por Sainta Marys University (Halifax, Canadá), mencionó que la corrupción es  parte de los flujos del poder. “Como investigadores podemos analizar no solamente el flujo del agua, sino del poder, discurso dominantes que pretenden promover soluciones falsas en favor del gran capital y no del bien común.

Aquí en Zacatecas-indicó- tenemos producción de algunos productos que pueden ser comparables a los de Guanajuto en donde se tiene sobre explotación de agua para producción agrícola, Contaminación del agua subterránea que está empeorándose más, conforme se agotan los acuíferos.

Por ello consideró que en lugar de promover una justicia ambiental, hídrica, se promueve en Zacatecas que  el agua de mejor calidad, se fluye hacia el dinero y la de peor calidad con niveles de arsénico y fluor por encima de las normas , se utiliza en mayor medida para para el uso doméstico.

Dijo que en Zacatecas se promueve la construcción una obra una gran infraestructura hidráulica la presa Milpillas y “es una solución falsa que no va a poder hacer frente a la crisis en sus tres dimensiones, ni siquiera en la primera que tiene que ver con la sobreexplotación de los acuíferos”.

Aseveró que el proyecto de la presa Milpillas se impulsa porque puede estimular la economía. “Recientemente cuando López Obrador anunció  proyectos de infraestructura, que incluye el acueducto de Milpillas y El Zapotillo, era explícitamente para dinamizar la economía, no era para resolver el problema del agua, para proporcionar oportunidades de inversión, para crear actividad económica”.

ALTERNATIVAS

El especialista consideró que las alternativas para solucionar el problema es atender las necesidades de agua de la población y después distribuirla para estimular la economía y lamentó que actualmente se esté  haciendo al revés.

“Las alternativas en primer lugar, buscarla manera con participación de diferentes sectores de la  sociedad civil, a obligar a las autoridades que busquen maneras de abatir el agotamiento de los acuíferos”.

En el discurso-señaló- se habla del día 0, que viene casi como una cosa natural, que se acabará el agua, pero no se menciona por qué los acuíferos están sobre explotados, por dar concesiones mas allá de la capacidad de los acuíferos y jalar el uso del agua a extracciones.

Aclaró que tecnificar la producción en zonas de riego no sería la solución. “Con tecnología ahorradora del agua, no se traduce en menor gasto de agua, sino que se pasa la concesión a otras personas y eso pasa a la sobreexplotación”.

 Creo-repuso- que en primer lugar hay que regular eso de priorizar el uso del agua de mejor calidad, no para las grandes empresas, ni agricultores privados sino para la vida, para el uso doméstico para satisfacer las necesidades básicas.

Hay que respetar los límites de la naturaleza-refirió- y usar solamente el agua que está disponible para obras sociales, regar parques, agroecología y si sobra para propósitos económicos. “El problema es que las prioridades están al revés, en primer lugar las empresas que tienen dinero, poder político, tienen acceso al agua en cantidades casi ilimitadas y a nosotros los pobladores que necesitamos el agua para nuestras necesidades básicas estamos en el último lugar”.

AGUA CONTAMINADA

Comentó que un 70 por ciento del agua que abastece la zona conurbada Zacatecas-Guadalupe, viene de los acuíferos Guadalupe Bañuelos y Benito Juárez, en donde se ha detectado niveles de fluor y arsénico, muy por arriba de las normas mexicanas que son benévolas, compradas con las normas recomendadas por organismos mundiales dela salud.

Por ello afirmó que es necesario tomar acciones que busquen alternativas que permitan satisfacer las necesidades con el agua.

Por su parte, el investigador y especialista en el tema de uso intensivo de aguas subterráneas, Jaime Hoogesteger, hizo un análisis de la manera en que se emplea el agua subterránea en el país y recordó que a partir de 1940, el gobierno de México entregó algunos pozos a ejidatarios para empoderarlos,  sin embargo hasta la fecha, la mayoría de ellos no participan en la producción a gran escala de alimentos, por lo que los pozos han sido entregados al gran capital para su explotación, y dio como ejemplo el caso de Guanajuato en donde se tiene una sobreexplotación importante del agua, a través de al menos 20 mil pozos para zonas de riego.

Dijo que este problema se debe en gran parte a que no se respetan las zonas de veda que quedan establecidas por las autoridades, pero estas mismas autoridades, como es el caso de la CONAGUA, no hacen nada para que se respeten y por el contrario, continúan otorgando concesiones.